Además de la atención en clínica, ofrecemos al paciente la posibilidad de la asistencia domiciliaria. Ideal para personas con dependencia, con dificultades de accesibilidad u horarios laborales difíciles de compaginar con otras actividades.

Este servicio es especialmente útil en caso de problemas de movilidad o desplazamiento, ya que brindamos un servicio con idéntica eficacia, completamente personalizado y en tu propio hogar. Nos trasladamos con el material necesario para que cada sesión se lleve a cabo de manera efectiva.

La ATM o articulación temporomandibular, es una de las articulaciones más importantes del organismo, ya que interviene en la masticación, el habla y la deglución, además de influir en la respiración y el sentido del gusto.

El tratamiento fisioterapéutico se basa en el abordaje de las patologías propias de la articulación, así como del estudio y tratamiento de síntomas relacionados, ya sean dolores de cabeza, mareos, problemas de oído e incluso vértigo.

La electroterapia comprende las aplicaciones terapéuticas de la electricidad. Su uso presenta beneficios como el aumento del riego sanguíneo y mejora del retorno venoso, elimina dolores de origen neurológico, muscular y articular, e incluso ayuda en la recuperación de la musculatura atrofiada.

Con el programa adecuado se consigue un abordaje ideal y no invasivo para el tratamiento de innumerables patologías, e incluso puede administrarse de forma complementaria para determinadas técnicas de entrenamiento deportivo.

La fascia es la envoltura de todas las estructuras del cuerpo. Diversas alteraciones en la misma pueden influir en la formación de contracturas, la aparición de tensiones, fallos de coordinación en el movimiento, o incluso la cicatrización de heridas.

Las técnicas de inducción miofascial regulan y eliminan las causas de lesión que tienen un origen en la misma mediante maniobras manuales que brindan al paciente una mejoría evidente en poco tiempo.

La radiación infrarroja es un agente térmico que se halla de forma natural en la luz solar. A diferencia de la radiación ultravioleta, de efecto fotoquímico, el calor radiado actúa sobre la piel y los tejidos superficiales, de manera que disminuye la tensión arterial, aumenta la sudoración y hace perder el exceso de sales minerales. También favorece la nutrición, la regeneración de los tejidos y la eliminación de células muertas. Además, posee un importante efecto analgésico.

Es el uso de campos magnéticos con fines terapéuticos. Al ser sometidas a un campo magnético, las cargas eléctricas de las células de nuestro organismo reaccionan provocando diversos efectos, como reordenación de las fibras colágenas, aceleración de la cura en los callos de fractura mal soldados y tejidos blandos, y acción analgésica y antiinflamatoria debido a la actuación en el sistema vascular.

Los aparatos actuales son de sencilla colocación y permiten una aplicación cómoda para el paciente, aunque su uso siempre es recomendable bajo supervisión del fisioterapeuta.

Denominamos masoterapia al conjunto de maniobras manuales, sobre una parte o totalidad del organismo, para movilizar los tejidos y conseguir beneficios diversos en el mismo.

Durante la práctica deportiva se emplea tras la competición para acelerar la recuperación de sobrecargas, aunque también puede usarse antes o durante la prueba para mejorar el rendimiento.

El masaje relajante tiene un efecto tanto físico como psicológico, pues ayuda a eliminar la tensión generada a lo largo de la vida diaria, al igual que las preocupaciones que afectan a nivel mental y emocional.

La técnica terapéutica es una parte importante en el tratamiento al preparar o completar una rehabilitación y se combina con otras técnicas para una mayor eficacia.

La terapia manual consiste en el tratamiento integral articular, neuronal y muscular de los trastornos funcionales del aparato locomotor y su repercusión en el organismo. Para ello se efectúa un análisis y valoración funcional del paciente para determinar la naturaleza del problema y sus bases neurofisiológicas y biomecánicas.

Cuando se identifica el problema se actúa mediante numerosas técnicas manuales, como la movilización y manipulación articular, estiramientos, masaje, movilización del sistema nervioso, estabilización pasiva y activa y ejercicios para mejorar la resistencia, la fuerza y la coordinación muscular.

Con este vendaje se evitan los problemas de la inmovilización convencional, como la escayola. Su uso limita el movimiento doloroso de una articulación dañada, pero permitiendo conservar su función. Su aplicación tiene beneficios como, permitir el reposo de los elementos dañados para mejorar la cicatrización, y reducir la acumulación de líquido.

Además, puede aplicarse tanto en la prevención de lesiones nuevas como durante el proceso de reiniciar la actividad física tras una recuperación de larga duración.

El vendaje neuromuscular o kinesiotaping, se considera una de las técnicas más novedosas de las últimas décadas, con especial repercusión dentro del área deportiva.

A diferencia del tratamiento convencional, pretende liberar el movimiento en lugar de limitarlo, lo cual permite una mejora de la movilidad, corrigiendo problemas articulares, normalizando el tono muscular, evitado la formación de contracturas y reduciendo el dolor del gesto deportivo mediante la aplicación de cintas elásticas adhesivas.

Además, ayuda a reducir la inflamación y mejora la circulación, pues levanta las capas de la piel aumentando el flujo sanguíneo.